lunes, 30 de marzo de 2009

LA POBREZA LLEVA A LA MARGINACION

LA MARGINACION

La marginación suele ir acompañada de tensiones, agresividad y malos tratos en entorno familiar, cuyas principales victimas son las mujeres, los niños y ¡os acianos. A veces, la salida a esta situación se busca en la evasión, a través del alcohol, las drogas o el abandono familiar. Los Ingresos necesarios para subsistir se obtienen a menudo de la práctica de mendicidad, de actos delictivos o del ejercicio de la prostitución.
Los niños que crecen en este ambiente suelen sufrir carencias afectivas y desarraigo familiar; su rendimiento escolar suele ser muy bajo, faltan a clase con regularidad y la mayoría termina por fracasar en los estudios y abandonar la escuela. Cuando dejan de ser niños, muchos de ellos siguen los pasos de sus progenitores. Unos malviven de la venta ambulante, la recolección de basuras, la prostitución o la mendicidad, mientras otros caen en ¡a delincuencia o las drogas. La situación de pobreza y exclusión pasa así, en muchas ocasiones, de una generación a otra.



Pobreza extrema y pobreza relativa

En los países desarrollados la pobreza extrema es minoritaria, pues los Estados proporcionan a prácticamente la totalidad de sus ciudadanos ciertos servicios imprescindibles que mitigan la situación de necesidad, como la educación básica gratuita, la atención médica y muchas ayudas en situaciones de paro, enfermedad y jubilación. Por ello, suele hablarse de pobreza relativa, es decir, de personas que son más pobres que la media, pero que viven mejor que la mayoría de la población de los países del Tercer Mundo. Por ejemplo, en la Unión Europea se considera «pobre» a aquella persona o familia cuyos ingresos son inferiores al 50% de la renta media de la población. Por este motivo, el umbral de la pobreza varía de un país a otro. En 2001, mientras en Luxemburgo se situaba en 25.030 dólares anuales, en España esta cifra descendía hasta los 10.160 dólares y en Grecia hasta los 8.250 dólares.

jueves, 26 de marzo de 2009

POBREZA EN LA INDIA



La República de India es una unión de estados federados que alberga la sexta parte de la humanidad. A pesar de ser el décimo país más industrializado del mundo -con tecnología y programas espaciales mundialmente competitivos-, también tiene el mayor número de pobres del planeta. Se estima que en la actualidad 330 millones de sus habitantes viven bajo el umbral de la pobreza, hay casi 2,5 veces más analfabetos que en todo el África subsahariana, y cerca de la tercera parte de los menores de 16 años está abocada al trabajo infantil.
El tradicional sistema de castas, a pesar de haber sido abolido por la Constitución en 1950, constituye aún la matriz social del país. Así, las mayores injusticias se comenten con las castas inferiores (dálits o intocables), las comunidades tribales y los pequeños agricultores. Esta situación los obliga a trabajar en condiciones degradantes, a no tener acceso a la propiedad de la tierra y a soportar violencia física y psicológica por parte de las castas superiores. Su extensa mano de obra hace que sean una opción muy popular para empresas internacionales que externalizan su trabajo.
Tras el azote del
tsunami, el 26 de diciembre de 2004, estamos trabajando en numerosas iniciativas. No sólo para recuperar las zonas más afectadas sino también para mejorarlas. El sur de India, las islas Andaman y Nicobar fueron unas de las zonas más afectadas. Miles de personas lo perdieron todo, incluso la vida.
En el ámbito de desarrollo continuamos, desde 1994, con nuestros proyectos en la región de Maharashtra. Incentivamos la educación primaria y los servicios de salud, proporcionamos acceso a los recursos productivos y ayudamos a la consecución de los títulos de propiedad de la tierra. Las comunidades más desfavorecidas, en especial las femeninas, son las principales beneficiarias de nuestras acciones.

POBREZA EXTREMA EN HAITI



Es el país más pobre del continente americano y sobran las palabras para confirmar esa realidad, sin embargo, al caminar sus calles y observar el pueblo haitiano nos damos cuenta que tiene sentido tender la mano para transformar el escenario actual y cambiar la historia Haití es en la actualidad el país más pobre del continente americano. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ocupa el puesto 108 en el índice de desarrollo humano, donde el 65 % de la población vive por debajo de la línea de la pobreza y en cuanto a la esperanza de vida no supera los 50 años. En esta pequeña porción de la isla caribeña “La Española”, nombre que fue dado por Cristóbal Colón una vez que tocó tierra firme, y que el pueblo haitiano comparte con República Dominicana, viven 8.120.000 personas. Un número significativo de personas no tiene trabajo (cerca de un 80 por ciento), ni acceso a la salud (casi el 90 por ciento). La vida en Haití parece detenida en el tiempo: los pobladores compran el agua por la calle a una suerte de aguadores, que con enormes recipientes sobre su cabeza ofrecen el vital líquido. Es común ver a la gente bañarse en la calle en aguas nauseabundas, y dormir a la intemperie en casas rudimentarias entre escombros y basura.